viernes, 4 de noviembre de 2011

Me he perdido. Lo acepto, me hundí en tus palabras, en nuestros sueños... nuestros proyectos, nuestras ganas de vernos, nuestra lujuria encerrada entre pestañeos. Recuerdo la última vez que te vi. Ardía algo entre nosotros, algo tan grande que conseguía mantenernos distantes... dejando el frenesí en un segundo plato. Y me quedé con hambre. No bastó con comernos con los ojos, con tantear las bocas a dos centímetros... no pudimos. No pude. Y... adiós.






No hay comentarios:

Publicar un comentario